Estamos en el mes de los vientos, y en Mi Señal te vamos contar cómo un vuelo de cometa y la curiosidad de una persona logró cambiar el mundo con un gran descubrimiento.
¿Sabes qué son los rayos y por qué salen del cielo en medio de las tormentas? Pocos lo sabían hasta 1752, cuando Benjamín Franklin, un curioso inventor, se le ocurrió llevar a cabo un experimento extraño y muy, muy peligroso, por lo que no debes realizarlo bajo ninguna circunstancia.
Un día Franklin vio que el cielo estaba lleno de nubes negras que anunciaban una fuerte tormenta, su inquietud lo llevó a crear una cometa con 4 tiras delgadas de cedro, alrededor puso un paño de seda con una cola y en la parte de arriba puso una punta de metal. Al otro lado del hilo que sostenía este objeto, amarró una llave metálica siempre atento a no mojar la parte final del hilo con la llave.
A los pocos minutos de vuelo cayó un rayo sobre la cometa cargando la llave con electricidad. Cuando Franklin acercaba su mano saltaban chispas llenas de energía.
Esta repentina idea expuso la posibilidad de extraer energía de los rayos y demostró que una pieza de metal puede atraer la caída de corrientes eléctricas hacia la tierra, ayudando a la creación de los pararrayos, una barra metálica que protege a los edificios de la caída de estas descargas eléctricas.
Así que cuando mires un pararrayo en la punta de un edificio ya sabes que todo empezó con el vuelo de una cometa y el ingenio de un inventor, por eso cuando tengas alguna inquietud sobre lo que te rodea, no dudes en buscar la respuesta, siempre y cuando no te genere ningún riesgo, ¡puedes llegar a descubrir un hecho muy importante!
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