21 Julio 2015
Nada mejor que relajar nuestra mente y cuerpo practicando una actividad física entretenida y divertida. Nuestro gato gurú, Swamíchico, lo sabe bien por eso él enseña a 8 vacas muy estresadas, y por supuesto a todos los niños, a iniciarse en esta disciplina milenaria, motivándolos a estar en movimiento, hacer ejercicio regularmente, comer saludablemente y adoptar hábitos de vida sanos.
Descubramos junto a Swamíchico y ‘Ooommm Mmmooo’ un poco más del Yoga para niños:
¡Empecemos!
Lo primero que debemos saber que lo más recomendable es iniciar a practicarlo después de los 4 años, lo segundo es usar ropa cómoda y ligera adecuada para los movimientos que se practicarán, contar con un espacio silencioso, ventilado o al aire libre y por último tener a la mano una colchoneta, para evitar lastimarnos.
Las posiciones y sus beneficios…
Antes de practicar cualquier posición sin preparación, lo ideal es que en el Yoga para niños primero se aprenda a respirar, relajarse y concentrarse.
Luego de esto podemos poner en práctica fáciles posiciones, adecuadas a cada edad, como la postura de la montaña para llenarse de energía, el saludo al sol para relajarse y disfrutar de un día alegre y hasta la postura del toro valiente para perder el miedo escénico, estas y muchas más secuencias le ayudará a grandes y niños a:
- Mejorar la flexibilidad del cuerpo.
- Estimular la circulación sanguínea.
- Bajar el estrés infantil causado por diversas situaciones.
- Desarrollar la atención, concentración y la imaginación.
Con el exceso de información y actividades sedentarias, el Yoga para niños se convierte en la herramienta ideal para compartir en familia, ayudarles a prevenir enfermedades, y a fortalecer su personalidad.
Así que escucha los latidos de tu corazón y haz clic en este enlace para que la energía positiva, la paz y el amor invadan tu vida con estas 4 posiciones de Yoga.